POESÍA. NARRATIVA. INFORMACIÓN LITERARIA. CONCURSOS. AUTORES CLÁSICOS Y NÓVELES


Puedes pedir los libros de la autora al mail: beamarchisone@gmail.com (envíos a todo el país)

LIBROS PUBLICADOS POR LA AUTORA
(poesía y narrativa)
"DE LOS HIJOS" (2014)- Ediciones Mis Escritos (Bs. As.)

Rincones y Acuarelas I (Poesía) -2019- La Imprenta digital (Bs. As)

Rincones y Acuarelas II (Narrativa)- 2019- La Imprenta digital (Bs. As.)

Los encontrarás:
En Rafaela (Santa Fe): en Librerías "EL SABER", "PAIDEIA" y "FABER".
En San Francisco (Córdoba): en Librería "COLLINO"
y en otras librerías del país.

sábado, 25 de octubre de 2025

CONVERSACIONES CON LA ABUELA: "En el antebaño"


 Anoche me estaba maquillando un poco para ir a una obra de teatro en el salón de la biblioteca. Julia me miraba reflejada en el espejo.

JULIA- no parecés una abuela

YO- ¿Por qué lo decís Julia?

JULIA- porque las abuelas no se pintan.



lunes, 20 de octubre de 2025

"Cuatro cuadras" - (de la autora)

Vine a la vida un frío junio

a escasas cuatro cuadras de tu casa,

tú ya contabas con diez años,

yo ni siquiera sabía de tu mirada,

tú ya andabas correteando en las veredas,

con canicas o un balón,

o esquivando indios y piratas,

yo, en mi llanto de bebé,

arropada en una cuna

con una sábana blanca,

con sólo unos pocos metros

entre tu casa y mi casa.

Y así, anduvimos, un trecho,

advirtiendo el mundo por sendas separadas,

tú, con tu impetuosa juventud,

yo, aún con la inocencia de mi infancia,

y crecíamos,

al ritmo de los sueños,

deambulando por cornisas,

optando por senderos llanos

o cuestas empinadas,

sin percibir todavía

que estábamos allí,

a sólo cuatro cuadras de distancia.

Y un día,

un misterioso día,

cuando confabularon duendes y fantasmas,

la brisa del norte

me apareció de pronto

con tu frescura,

con tu picardía espontánea,

y fuimos dos en una misma senda,

dos en la noche de verano

y en lluvias de primavera

bajo un mismo paraguas,

y en tus labios y en mi tez

se despertaron calandrias,

entonces supe de pájaros,

de un catorce de febrero

de tu nombre en tantas letras,

e insomnios de madrugada.

 

Hoy somos ese sol por la mañana,

el que atrapa la ventana,

inundándonos la piel.

Somos un pedazo de la tarde,

un encuentro programado

con la taza de café.

Somos un paseo en bicicleta, 

o una excursión por la plaza

a la par igual que ayer.

Somos esos hijos que parimos,

que soltamos a la vida,

con el reto de crecer.

Somos esos nietos que se asoman

sorprendiéndonos las horas

con diabluras de papel.

 

Y seguimos andando,

con el cabello más blanco

y otras líneas en la cara,

y el torrente que nos lleva

nos reta y nos desafía

a sofocar las borrascas.

Pero al final del día,

cuando la luna se asoma

en las tipas de la plaza,

volvemos a programar

ese encuentro cotidiano

en tu casa, que es mi casa.

 

lunes, 30 de junio de 2025

Truco, mentira y seducción (de la autora)




Mezcla de seducción y de mentira,

de señales esquivas y secretas,

de miradas que se cruzan, clandestinas,

buscando una estrategia.

 

El juego requiere picardía,

respetando las reglas,

los gestos generan el mensaje,

el naipe llegará como respuesta.

 

Ya se mueven los labios en silencio,

ya se entornan los ojos, ya se encumbran las cejas,

un rival a cada lado,  y el aliado

al frente de la mesa.

 

Un halo de amistad vuela la sala

mientras sigue la escena,

aunque haya que plantar duda y engaño,

aunque haya que ocultar una apariencia.

 

Ya se exponen las cartas españolas

y la batalla comienza,

el trío de barajas se desarma

a la orden de una seña.

 

Con su orden paternal de turno,

“poné” grita el pie, mientras alienta,

será fundamental una maniobra

que asegure la primera.

 

Ya suena “envido” desafiando puntos,

los números vendrán por la derecha,

entonces se anima la partida,

y el reto finaliza con las buenas.

 

Y siguen las miradas escondidas

porque la segunda ya se allega,

al canto de “truco” va la ronda

mientras las trampas acechan.

 

Un cuatro disimula el poderío,

y planta confusión para la treta,

entre “quiero” y “no quiero” van los puntos,

entre gritos y jugadas encubiertas.

 

Se miden las palabras con cuidado

insinuando prudencia,

ya crece la tensión y el titubeo

cuando el final se acerca.

 

Se recita poesía, se provoca,

se presiona con pasión y con destreza,

será vencedor el más osado

o el que porta la seña.

 

El  encuentro no tiene sitio propio,

será la mesa de cualquier taberna,

o tu casa, o mi casa,

o cualquier rincón donde las cartas quepan.

 

De fiesta popular va la jornada,

tan propio como el tango o la chacarera.

La escuela es la calle, y es cultura,

es acervo de tradición y herencia.

domingo, 18 de agosto de 2024

CONVERSACIONES CON LA ABUELA: "Mora"

 


Julia- Abuela, ¿ por qué la Mora es un perro?

Yo- Y porque hay personas y animales, y la Mora es un animal.

Julia-¿ pero por qué?

Yo- (sin saber cómo darle una explicación lógica y sencilla, ya que evidentemente lo que le dije no la conformaba, busqué en mi mente lo que tenía más a mano, ya que me tomó de sorpresa. Y le contesté algo que a mí tampoco me conformaba) y porque nació perro.

Se quedó callada, quizás pensando que no tenía sentido seguir preguntando, porque yo no le iba a sacar la duda.

Quizás más adelante Julia, cuando yo también lo entienda…

martes, 23 de abril de 2024

Crónica de una tarde de lluvia en Buenos Aires (De la autora)

 

Llueve en Buenos Aires y yo salgo a comprar libros de inglés. Pero no los clásicos, sino novelas tipo best-sellers. Cada vez que puedo, compro uno para tener a mano en la mesita de luz, por si termino uno, para poder empezar enseguida con otro.  Como era de esperar, en la mayoría de las librerías me ofrecen Shakespeare, George Orwell, Edgar Alan Poe, Dickens, Eugene O’Neill. He leído mucho de ellos en el profesorado, y después también. Pero ahora busco otra cosa, y lo que busco normalmente lo encuentro de segunda mano. Entro y pregunto; son escasos los locales que venden usados.  En todas las librerías –que están abiertas hasta altas horas de la noche- me indican “ahí, en el estante de abajo”, o “en aquel de más arriba”. Nunca en un estante a la altura de mi cabeza.  Entonces, tengo que agacharme, casi acostada, o estirar el cuello hasta donde me dé, para poder leer los títulos de cada ejemplar. Pero no encuentro mucho. Hasta que llego a una librería en calle Corrientes, casi Callao, que tiene en la entrada una caja con usados, tapado con un gran plástico. Sigue lloviendo.  Levanto el plástico, y el empleado me dice que no destape porque se mojan. Busco usados en inglés- le explico. Ah pero no, los de inglés están allá abajo- me contesta, como lo esperaba. Entro sin dudarlo y me agacho al lado de la estantería, mientras pasan algunos extranjeros que no sé qué buscan. Luego me siento en el suelo, porque agachada mucho no aguanto. Y encuentro dos que me interesan. Cada uno de esos libros- como otros que he comprado- tiene una personalidad propia y única. Y yo imagino a sus dueños, deleitándose- como yo- con la lectura entre sus manos, con el olor de la tinta. Alguno tiene una marca de bolígrafo hecha por un niño, otro está rasgado, pero a mí no me importa, porque es parte de la historia y del recorrido que hizo ese ejemplar hasta llegar a mis manos. Y ahora… son míos…