LA BARCAZA.
No regresó. A lo lejos vio la flota
alejarse. Silente corrió el llanto
en los rostros turbados del espanto…
Y a la orilla volvió vacía y rota.
El maderamen yace. Una gaviota
se posa en él y observa, gris amianto,
el mar que se desgrana en blanco manto
y en la ribera muere gota a gota.
El faro fue testigo de la espera,
de la desolación, de la quimera
que expiró como expira la esperanza.
Abnegados y rudos pescadores
de la mar camaradas-contendores,
juguetes del destino y la asechanza.
Delia E. Fernández Cabo.
EL MAR SIEMPRE
El mar siempre sugiere
lejanía,
inmensidad,
profundidad, misterio,
masa añil que domina
el planisferio
y ostenta su
abundancia y su osadía.
Mixtura de quietud y
de anarquía,
exhibe el poderío de
su imperio,
es del alma seguro
refrigerio
observar el
crepúsculo del día.
El mar siempre
seduce y maravilla,
origen de leyendas
de sirenas
y cuentos memorables
de la infancia,
y compinche de
aquellos que en la orilla,
ahogan las
nostalgias y las penas
de amores y familia en la distancia. Beatriz Chiabrera de Marchisone
Resultados "IX Certamen Internacional de Sonetos". Tema "EL MAR". (Dolores- Pcia de Bs. As.)
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